Dado que el astigmatismo depende de la forma de la córnea y la entrada de la luz, estos cambios pueden estar presentes desde la infancia. A menudo el astigmatismo aparece a una edad temprana, por lo que es importante llevar a su niño a un examen ocular para evitar que tenga problemas de visión en la escuela por un astigmatismo no corregido. Según un la Organización Mundial de la Salud aproximadamente una tercera parte de la población mundial requiere lentes pero no todos lo saben.

Astigmatismo Regular

Los planos de entrada de la luz son perfectamente perpendiculares entre sí (forman un ángulo de 90 grados)

• Astigmatismo miópico: Uno o ambos planos principales del ojo enfocan como miopes, es decir delante de la retina, aunque en diferente grado.
• Astigmatismo hipermetrópico: Uno o ambos planos principales enfocan como hipermétropes, es decir detrás de la retina, aunque en diferente grado.
• Astigmatismo mixto: Un plano principal enfoca como miope (delante de la retina) y el otro como hipermétrope (detrás de la retina).

Astigmatismo Irregular

Los planos de la luz no son perpendiculares. El astigmatismo irregular puede ser consecuencia de una lesión en el ojo que provocó la cicatrización de la córnea, por alguna cirugía o por enfermedades como el queratocono.

El astigmatismo provoca visión borrosa o distorsionada en cierto grado, a todas las distancias (cerca y lejos). Dependiendo de la edad del paciente y del tipo de astigmatismo que padezca o de la graduación que presente, puede percibir o no síntomas y estos pueden ser diferentes.
Los síntomas de un astigmatismo sin corregir son fatiga visual y cefalea, en especial luego de leer u otras tareas en las que se requiera utilizar la visión durante un tiempo prolongado.
El estrabismo (desviación de los ojos) también es un signo muy común.

Se han diseñado varias formas de corregirlo. Entre estas se cuentan los anteojos, lentes de contacto y la cirugía refractiva. En todos los casos lo que se logra es desviar el trayecto de los rayos de luz para que la imagen se enfoquen adecuadamente sobre la retina.

  Los anteojos permiten buena visión mientras se estén utilizando. Tienen la limitación de que a medida que la miopía es mayor los cristales se hacen más pesados, más gruesos y distorsionan la imagen. Los anteojos no cubren todo el campo visual (por fuera del marco de la montura o armazón hay visión borrosa) y para algunas personas son estéticamente indeseables. Son una buena forma de corregir la miopía leve y se recomienda tener un par de descanso.

  Los lentes de contacto permiten corregir la visión en todo el campo visual. Requieren disciplina y dedicación por parte del usuario ya que deben ser limpiados y  almacenados adecuadamente diariamente. Pueden producir sensación de basura en los ojos o irritación. Dependen mucho del cuidado que se les da e incrementan el riesgo de infecciones de la córnea. Permiten la corrección de la miopía moderada y alta sin ser tan notorios como los anteojos. Pueden ser blando, duros e híbridos.

  La cirugía refractiva permite corregir la visión sin necesidad de colocar objetos extraños sobre la córnea. Una vez que se realiza no se depende de anteojos o lentes de contacto para tener una visión adecuada. No es un procedimiento obligatorio en casi ningún caso sino más bien una alternativa para la corrección de la miopía en personas que no desean utilizar anteojos ni lentes de contacto. Permite la corrección de la miopía leve, moderada y alta sin ser notoria en absoluto. Existen diferentes tipos de cirugía refractiva láser entre los que se encuentran LASIK, LASEK, PRK, SMILE.